Los falsos techos son una perfecta solución, que además de tapar las antiestéticas instalaciones eléctricas y de ventilación, permiten multitud de acabados y posibilidades estéticas y funcionales.

Se construyen con placas de cartón-yeso (pladur), y de una forma rápida, económica y limpia, se obtienen resultados fantásticos y totalmente personalizados. Con la ventaja añadida sobre la construcción habitual, que permite generar diversos contornos y niveles.

Techos registables y desmontables; techos continuos; techos lisos, techos en bóveda, techos con aislamiento acústico...

Con los techos de pladur se puede conseguir una gran absorción acústica, eliminando problemas de reverberación.